La democracia es la forma de gobierno que da sustancia al capitalismo; no es mandamiento que el Omnipotente entregara a Moisés |
Los norteamericanos deben aprender que todos los humanos tenemos el mismo valor ante Dios (al que usan de manera irresponsable para sentirse superiores y bendecidos, como vil expresión del desprecio con el que miran al resto de la humanidad, y en el que creen, de forma muy peculiar, validando el exterminio sistemático de millones de personas que sus mandatarios ejecutan en otras naciones a las que, da la impresión, la soberanía les ha sido despojada por encargo del propio Todopoderoso); que no son mejores que nadie y que cometen un grosero crimen al permitir al poder imperial tratar como desechables a quienes pensamos y actuamos, por ley natural de vida, de manera diferente.