Ningún integrante del gobierno renuncia o es procesado. En todas partes del mundo, incluso en países mucho más pobres que República Dominicana, será siempre posible ver lo que han hecho esos mandatarios y autoridades judiciales (casos citados de Perú, Panamá, Guatemala y El Salvador). Lo que nunca veremos es que un "tíguere" renuncie o sea procesado por un sistema judicial que el mismo descarrío ha degradado |
Muchos dominicanos se han sorprendido porque el presidente de Perú, Pedro Pablo Kuczynski, renunció (debido a las acusaciones de corrupción y soborno); porque el expresidente de ese mismo país, Ollanta Humala, y su esposa Nadine Heredia, fueron encarcelados (por el escándalo de Odebrecht); porque el expresidente de Panamá, Ricardo Martinelli, fue hecho preso (por grabar conversaciones de sindicalistas y políticos de oposición); porque el expresidente de Guatemala, Álvaro Colom, fue detenido (por peculado y fraude); porque el expresidente de El Salvador, Elías Antonio Saca, fue arrestado (por su relación con el caso de enriquecimiento ilícito de su secretario privado)... En fin, porque en República Dominicana -que está entre los cinco países más corruptos del mundo en la lista de Transparencia Internacional-, a diferencia de las demás naciones, nadie guarda prisión por uno solo de los miles de escándalos de cohecho, tráfico de influencias y saqueo al erario que han estremecido la patria de Duarte, Sánchez y Mella.