Usamos cookies para brindar un mejor servicio. OK Más información

[V de IX] Cómo se convirtieron en tiranos, una serie documental de Netflix que retrata de cuerpo entero al tirano mayor - Segunda Guerra Mundial: consolidación del más poderoso imperio...

Estados Unidos -el imperio del mal, o la mayor tiranía que ha conocido la humanidad- pondría fin a la Segunda Guerra Mundial al lanzar dos bombas atómicas en dos ciudades japonesas que provocarían desolación y muerte, nunca antes vistas, entre la población civil que nada tenía que ver con el ejercicio bélico (con tan ruin acción pasaría a convertirse en el único país en lanzar bombas nucleares contra seres humanos, ¡y todavía se arroga el derecho de prohibir su fabricación a otras naciones!)

Segunda Guerra Mundial: consolidación del más poderoso imperio...
Afiche propagandístico que buscaba que los "americanos" se enlistaran en el ejército para la Primera Guerra Mundial

Mantenerse al margen de la Primera Guerra Mundial le facilitó la reelección al presidente Woodrow Wilson; no obstante, cinco meses después, llamaría a los norteamericanos a combatir en el conflicto bélico. “El mundo debe ponerse a salvo para la democracia. No tenemos fines egoístas que servir. No queremos conquistar ni dominar”, diría. En la contienda, Estados Unidos perdió cerca de 120,000 soldados (casi 10 millones de personas, soldados y civiles, murieron), y su participación fue decisiva para la victoria de los aliados gracias al aporte en armas y efectivos; de la conflagración salió convertido en potencia mundial y pieza fundamental dentro del sistema internacional.

El Tratado de Versalles puso fin a la guerra; Alemania fue obligada a indemnizar, con una enorme suma de dinero -por los daños que causó-, a los países contra los que luchó (lo que se tradujo en mucha pobreza), y a despojarse de armamento y territorio; se le permitió, bajo ciertas normas, la conformación de un ejército muy limitado. Todas estas medidas provocaron una gran humillación a su pueblo. El resultado sería funesto: alentaría el nacionalismo (propiciando el fortalecimiento del partido nazi) y estimularía el rearme que muy pronto llevaría a una contienda mayor: la Segunda Guerra mundial.

La guerra, aunque después de muchos fracasos, sirvió a Estados Unidos -donde no se produjo ningún combate- para desarrollar la industria de la aviación (los norteamericanos comprendieron que el poder de la aviación inyectaría un nuevo ímpetu a las guerras por venir). La industria de la tiranía mayor tuvo un desarrollo extraordinario y el comercio experimentaría un formidable avance; en cambio, en Europa, la guerra ocasionaría cuantiosos daños, sobre todo en las grandes economías, que a la vez fueron las protagonistas principales del conflicto: Reino Unido, Alemania, Francia e Italia. "Con la Primera Guerra Mundial, Estados Unidos se convirtió en el principal destino del oro europeo", y sectores como "el automovilístico, el energético, el químico, el de transporte y, por supuesto, el armamentístico, vivieron una etapa de esplendor".

David Harvey: «Los capitalistas persiguen la expansión del valor a través de la explotación sin tener en cuenta las consecuencias sociales. Las armas no sólo deben comprarse y pagarse con excedentes de capital y trabajo, sino que también deben utilizarse. Porque este es el único medio que el capitalismo tiene a su disposición para alcanzar el nivel de devaluación ahora requerido. La idea es terrible en sus implicaciones. ¿Qué mejor razón podría haber para declarar que es hora de que el capitalismo desaparezca, para dar paso a un modo de producción más sensato?».

Con tan confortable y halagador cuadro entraría Estados Unidos a la Segunda Guerra Mundial, que había iniciado el primero de septiembre de 1939 con la invasión alemana a Polonia (Alemania, con Hitler y el partido nazi a la cabeza, había recuperado su capacidad económica y fortaleza militar, y necesitaba, con fervor patológico, vindicar la humillación a la que había sido sometida por Estados Unidos y los Aliados con la implementación del Tratado de Versalles), y lo hace poco más de dos años después de dar inicio, el 8 de diciembre de 1941, con la declaración de guerra a Japón por este haber iniciado, el día anterior, un ataque aéreo "sorpresa" sobre su base naval de Pearl Harbor (Hawái).

Japón formaba parte, con Alemania e Italia, de la alianza que se conoció como el "Eje" -término utilizado por Benito Mussolini para referirse al "Eje Roma-Berlín", capitales de los dos países que, según él, formarían un Eje alrededor del cual girarían las demás naciones europeas-, a la que había ingresado el 27 de septiembre de 1940 con la firma del "Pacto Tripartito"; por su parte, Estados Unidos ingresó, con la declaración de guerra, a formar parte de los "Aliados" [alianza originalmente conformada por Gran Bretaña y la Unión Soviética (URSS)].

¿Ayudó Estados Unidos a derrotar las naciones del Eje? Indudablemente que ayudó, pero fueron las tropas soviéticas las triunfadoras indiscutibles de la gran conflagración que para la URSS se había convertido en Guerra Patria. Transformado en el país con la mayor economía del mundo, con extraordinarios logros en el campo de la guerra (la economía de guerra sería el norte hasta nuestros días), y con la soberbia en su máxima cota, Estados Unidos pondría fin al conflicto mundial al lanzar dos bombas atómicas en dos ciudades japonesas que provocarían desolación y muerte como nunca antes, sobre todo entre la población civil que nada tenía que ver con el ejercicio bélico (han sido las únicas lanzadas contra seres humanos).

Atilio Boron: «Uno de los desafíos urgentes que tienen los gobiernos progresistas de América Latina es desarrollar una estrategia continental adecuada para evitar que Estados Unidos arrase con los procesos emancipadores».

También, y junto a sus pares británicos, los norteamericanos bombardearían, apenas tres meses antes de la capitulación de los nazis, la pacífica ciudad alemana de Dresde (la "Florencia alemana", llamada así por su arquitectura y rica vida cultural), arrasando prácticamente con todo y provocando la muerte de cerca de 25,000 inocentes, hecho consumado por la "Coalición del Mal" (Washington-Londres) para "agradar" a Iósif Stalin (dictador soviético cuyos atrocidades sólo son comparables con las ejecutadas por Mao Zedong, la Iglesia Católica y el tirano mayor).

Harry S. Truman, figura de mayor jerarquía dentro la tiranía mayor cuando las bombas atómicas fueron lanzadas sobre Hiroshima y Nagasaki

Toda la maldad y todo lo ignominioso de la Alemania nazi fue copiado a la perfección por Estados Unidos: la propaganda y la difusión de mentiras, los métodos para mantener enajenados a sus ciudadanos, la fórmula para el lavado de cerebro, etc.; pero lo que mejor representa el carácter malévolo, virulento y corsario de la tiranía mayor es el traslado a suelo norteamericano de los más capaces científicos que estuvieron a disposición de Hitler en el desarrollo de armas nucleares, químicas y biológicas, con la finalidad de usar sus conocimientos y crear nuevas formas de exterminio masivo, de la mano siempre de la devastación y el pillaje.

Con Estados Unidos a la cabeza, los aliados cometieron, en Italia y Alemania, numerosos crímenes de guerra: lanzaron feroces ataques aéreos contra la población civil, cometieron atentados contra inocentes, saquearon sus bienes, asesinaron prisioneros de guerra desarmados, torturaron (práctica que el imperialismo yanqui mantiene hasta hoy en la Base Naval de Guantánamo, enclave que arrebató a Cuba en una de sus múltiples proezas tiránicas)...

Las Masacres de Canicattì (matanza de civiles italianos), Dachau (asesinato de prisioneros de guerra alemanes que se habían rendido) y Biscari (eliminación de cerca de 80 prisioneros de guerra, la mayoría italianos), y la gran cantidad de ejecuciones sin la celebración de juicios, son sólo algunas de las "gestas heroicas en las que ha brillado la tiranía mayor".

América (la nuestra) no iba a permanecer al margen; durante todo el conflicto, Estados Unidos se mantuvo muy activo. ¡Demasiado activo! ¡Ya el mundo le pertenecía! Instaló bases aéreas y navales en Ecuador, Brasil y prácticamente todo el Caribe; destronó en Panamá, con un golpe de Estado, a Arnulfo Arias (para sustituirlo con un fantoche que permitió la ampliación de sus instalaciones militares en el canal); fundó la Junta Interamericana de Defensa (integrada por los ejércitos de la región), "que tan nefasto papel jugaría en América Latina y el Caribe"; obligó a Argentina a cortar sus relaciones diplomáticas con Alemania, Italia y Japón; derrocó al mandatario brasileño Getulio Vargas y en Bolivia al gobierno (nacionalista, reformista y defensor de las mayorías indigenas) de Gualberto Villarroel; respaldó el fascismo en Colombia; y apadrinó las más férreas dictaduras en El Salvador, Honduras, Nicaragua y República Dominicana.

Rafael Correa: «Que a estas alturas de la historia de la humanidad... aceptemos el bloqueo de un país por parte de otro [Estados Unidos], me parece escandaloso. Tendremos que analizar si asistimos a esa clase de cumbres [controladas por EE. UU.] donde no se busca resolver los problemas fundamentales de nuestra América, sino, hacer y decir lo "políticamente correcto" en función del establishment. Para eso no nos vamos a prestar».

No conforme, impuso a Latinoamérica el Tratado Interamericano de Asistencia Recíproca [(TIAR), «que sirvió como “modelo” a todos los pactos militares establecidos por los Estados Unidos en el resto del mundo»]; dio apoyo al “cuartelazo” en Ecuador contra el presidente José María Velasco Ibarra y a la brutal represión en Chile, que emprendiera el presidente Gabriel González Videla contra las fuerzas populares, y en Puerto Rico (con la simpatía de Luis Muñoz Marín, su untuoso colonizado) contra el movimiento independentista; «en Haití, patrocinaría el golpe militar que llevó a la presidencia al general Paul Magloire, quien de inmediato se sumó a los gobiernos latinoamericanos y caribeños que dentro del marco de la Organización de Estados Americanos [(OEA), organismo regional fundado en 1948 que funge como comisionado "legal" de los desmanes que comete el tirano mayor] respaldaron la agresión estadounidense contra la entonces recién fundada República Democrática y Popular de Corea (RDPC)»...

Consulta: Agresiones históricas de Estados Unidos/Luis Suárez Salazar [LSS] .

Continuación...
[ VI ] La Guerra Fría: comunismo "hasta en la sopa". El imperio del mal...

Anteriores...
[ IV ] Nacimiento del más poderoso imperio; asentamiento de la tiranía mundial...
[ III ] Etapa inicial de la consolidación de la tiranía mundial...
[ II ] Nacimiento y formación de la más intolerante tiranía que ha conocido la humanidad...
[ I ] Pasos fundamentales para una tiranía...

Ing. Nemen Hazim Bassa
San Juan, Puerto Rico
1 de julio de 2022